DANOS EL PAN QUE REALMANTE NECESITAMOS...
Estando Juan Mateo en Unidad de Terapia Intensiva, pasamos casi todo el día en el hospital.
Recibimos visitas de casi toda nuestra familia cordobesa, los que pasaban horas acompañándonos.
El calor del verano nos hacía buscar la sombra y protección de algún árbol a la entrada del Infantil, pues el calor era notorio.
Recuerdo que varias veces con Gabi, sentados en unos bancos, bajo esos mismos árboles nos reconfortaba el Señor al leer y comentar los proverbios. El que más nos marcó en esos momentos en que Mateo no reaccionaba casi nada, fue Proverbios 30:7,8y9 que dice así:
Dos cosas te he demandado;
No me las niegues antes que muera
Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí.
No me des pobreza ni riquezas;
Mantenme del pan que he menester
No sea que me harte, y te niegue, y diga, ¿Quién es Jehová?
O no sea que siendo pobre, hurte y blasfeme el nombre de mi Dios."
Ese día oramos juntos, con lágrimas rogando que Dios nos mantuviera cada día con el pan que necesitamos con nuestro hijo.
Señor: Danos cada día lo que necesitamos ver en Mateo, dale mejoría cada día y ayúdanos a ver lo que realmente necesitamos ver, no pedimos que lo sanes de golpe, como muchas veces queremos que pase, ni que lo dejes ahí, en ese estado pues no sabremos continuar. Solo te pedimos que nos permitas ver una mejoría cada día.
No se como explicarlo, pero seguro estoy que desde ese día Mateo comenzó a mostrar una mejoría que aunque lentamente, fué siendo cada vez más notoria.
La alegría de verle mover sus piernas, la alegría de verle mover sus manos, y sí, fueron días duros... Se debe tener mucha paciencia, debemos saber que no depende de nosotros para nada... pero sí debíamos demostrarle que estaban cerca, Mamá y Papá quienes le aman con todo el corazón. ¡Cómo deseamos verle mejorar! haciendo lo que fuera por trasmitirle cariño, y ánimo. Que fuertes momentos...
Lo que mucho disfrutamos fue cuando luego de pedirle que hiciera "ojitos", (esto era lo que el Tata Antonio le enseñó); -A ver mijito, hágale ojito al tata.. y Mateo cerrando ambos ojos llenaba de sonrisas al que lo mirara, como cualquier pequeño de un añito que está dispuesto a aprender lo que sea para llamar la atención y ser felicitado, porque vaya que es lindo reconocer sus nuevos logros y disfrutar de ellos, y hacerle notar a la criatura que es ella sumamente especial para cada uno de nosotros.
Pero en ese estado... en terapia intensiva? Que tremenda experiencia! Una de tantas imágenes que perdurarán por largo tiempo. El modo en que Mateo se esforzó, para complacer el pedido de sus padres, Fuimos muy exigentes, o desconsiderados? De ninguna manera! a pesar de su deficiencia, o de las secuelas que todos temimos le quedaran, y aún viendo que Mateo tenía sus ojitos cansados y constantemente y prácticamente cerrados, pero en posición de descanso, luego de unos 15 segundos de pedírselo, cerró sus ojitos por unos instantes con una fuerza impactante y conmovedora, que nos estremeció de tal manera que no pudimos contener las lágrimas de alegría por lo sucedido.
En seguida volvió a aflojarse y quedó con ellos cerraditos prácticamente dormido, pues había sido mucho, muchísimo el esfuerzo realizado en ese momento.
Gracias Señor por ver como cada día nos diste el verdadero pan que necesitamos con nuestro pequeño Juan Mateo.
Comentarios
Dios los bendiga y Feliz Navidad!